El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha llevado este miércoles un paso más allá su uso de la amenaza nuclear y ha anunciado la entrada en servicio de misiles capaces de lanzar cabezas nucleares desde tierra, desde el aire y desde del mar: la llamada «tríada nuclear».
En concreto, se ha referido a nuevos emplazamientos con misiles intercontinentales Sarmat y a la entrega al ejército de misiles hipersónicos Kinjal y el enorme Tsirkon: «Como hemos hecho hasta ahora, pondremos especial atención en fortalecer la ‘tríada nuclear’, los nuevos lanzacohetes de misiles pesados ya están disponibles y pronto podremos empezar a distribuir los nuevos sistemas de misiles hipersónicos aéreos y marítimos.»
Lo ha dicho en un mensaje televisado a última hora de la noche del miércoles con motivo de la víspera del Día del Defensor de la Patria, y sólo 1 día después de anunciar que suspendía la participación de Rusia en el único tratado START vigente.
Este tratado controla y limita los arsenales nucleares en el mundo, y el anuncio de Putin lo han ratificado este mismo miércoles por unanimidad tanto la Duma (Parlamento) como el Senado de Rusia.
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