El actual concejal de Vox y portavoz del Grupo Municipal en el Ayuntamiento de Guadalajara, Antonio de Miguel Antón, ha anunciado su salida del partido y su adhesión al proyecto político liderado por Macarena Olona, «decepcionado y traicionado por las prácticas mafiosas de Santiago Abascal«. Ha señalado directamente al presidente de la formación de ultraderecha de «dictador», elegir «a dedo» a todos sus cargos y llevar a cabo prácticas que «infringen muchos de los derechos básicos fundamentales».
En una rueda de prensa donde ha comunicado su marcha de Vox y su apoyo a Olona, De Miguel ha denunciado que dicho partido “no cree en la política municipal, le estorba el pensamiento crítico y defiende un modelo autoritario y dictatorial”. Afiliado al partido ultra desde su fundación, con cargos de responsabilidad nacional, considera que el partido se encuentra sumido en una crisis, «carente de valores y democracia interna», a la vez que sumido en la práctica de «conductas mafiosas«.
Así lo ha señalado en rueda de prensa donde ha asegurado que ha intentado ser coherente con los principios con los que nació Vox y ha asegurado que ha trabajado “de forma firme, valiente y con el compromiso de hacer una Guadalajara mejor” por la confianza depositada por los votantes en 2019 y que por ese apoyo recibido no ha comunicado antes su baja del partido, a pesar de que la oficializó hace un mes.
En este sentido, ha explicado que «personas en las que creíamos que podíamos confiar, de repente, por intereses egoístamente personales, nos traicionan», algo que asegura le ha ocurrido «con Vox y con Santiago Abascal». Y es que para Antonio de Miguel, el partido de ultraderecha no es más que «una maquinaria al servicio de sus dirigentes, una fuente de empleo y colocación», siguiendo un modelo de «democracia autoritaria».
