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La situación en la Cañada Real, Madrid, es cada vez más difícil.
Un poblado a las afueras de Rivas, a escasos kilómetros de la capital, lleva tres meses sin suministro de luz ni de agua caliente, haciendo que las familias que allí viven estén pasando verdaderas dificultades.
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La alerta del temporal que se aproxima ha hecho que el alcalde de Rivas, Pedro del Cura, y la vicealcaldesa, Mónica Carazo, hana solicitado esta misma mañana a la Dirección General de Protección Civil que tome medidas ante «la emergencia humanitaria que atraviesa la zona después de llevar tres meses sin luz ni agua caliente».
La carta remitida por el consistorio se ha dirigido también al Ministerio del Interior y a la Delegación de Gobierno.