La revisión del anteproyecto de ley memorialista permitirá anular la condena que pesa sobre los infames juicios franquistas. El nuevo anteproyecto memorialista permitirá en su artículo 5.3 la declaración «ilegítimas y nulas de las condenas y sanciones con independencia a la calificación jurídica utilizada para establecer dichas condenas y sanciones».
La declaración de nulidad con independencia de la calificación jurídica permitirá «declarar la nulidad también de condenas dictadas en el marco de juicios injustos, de motivación política, aunque desarrollados con base en delitos ordinarios», como ocurre en los casos de Puig Antich y los últimos fusilados por Franco.
El informe del «relator» de Naciones Unidas fue muy claro cuando expresó que la declaración de ilegitimidad de la Ley de Memoria Histórica de 2007 se había manifestado insuficiente porque no ha conllevado la nulidad de esas sentencias, que es a lo que hay que aspirar».
Y es que la influencia del franquismo en la justicia durante la Transición ha consistido en poner palos en la rueda a una justicia responsable con los Derechos Humanos, fundamentalmente al nivel de los crímenes del franquismo. Una autentica aberración que sigue latente…
