España es cada vez menos democrática y más represora. A las diferentes policias del territorio estatal les sale más barato y cómodo utilizar la ley Mordaza en sus funciones. Ya que existe esa Ley, hay que utilizarla.
La policia de Euskadi, la Ertzaintza, responde con multas vía Ley Mordaza, cuando oyes o lee el lema “vergüenza me daría ser policía”. Este jueves al juzgado de lo Contencioso Administrativo de Bilbao, deberá dirimir si la sanción impuesta a Eduardo González, un conocido militante del movimiento memorialista y antifascista vasco tiene razón de ser o si se trata, tal como denuncia el afectado, de un golpe directo a la libertad de expresión.
17 de marzo de 2018, Plaza Moyua de Bilbao. En una fría mañana, unas cincuenta personas protestan en el centro de la capital vizcaína contra la Ley Mordaza. No estaban solas: ese mismo día, casi medio centenar de ciudades habían organizado acciones similares contra la norma represiva que instauró el Gobierno de Mariano Rajoy.
“Surrealista”, resume González cuando trae a su memoria lo vivido aquella jornada. “Llevábamos veinte minutos de concentración y no había pasado absolutamente nada –relata–. Justo cuando estábamos por terminar aparecieron dos furgonetas de la Ertzaintza. Dieron un volantazo, se dirigieron hasta la fuente y, tras descender de los vehículos, fueron directamente hacia mí”.
Este militante del colectivo Sare Antifaxista (Red Antifascista) había sido el encargado de legalizar la concentración. “Acompáñeme que le vamos a denunciar”, le dijeron los ertzainas. ¿El motivo? Los agentes alegan que durante el acto se coreó “vergüenza me daría ser policía”, una frase que González asegura que no se cantó textualmente así, sino con algún matiz. Sin embargo, no valió de mucho su explicación: hubo una multa de 80 euros que el afectado ha recurrido.
“No es por el dinero, sino por la libertad de expresión. Hemos recurrido porque sentimos que es injusto y denunciable: lo que buscan es coartarte para que la próxima vez no te movilices”, ha remarcado este colectivo.