Artículo de opinión extraido de La República:
Esta semana era el noveno aniversario, el día 19, de la muerte del amigo José Antonio Labordeta, es un buen momento para recordar aquellas palabras dirigidas a la bancada popular desde la tribuna del Congreso.
Tuve la suerte de compartir bancada durante la legislatura 2004-08 en el Congreso. Nos sentábamos juntos durante los plenos de aquella época pero no sólo eso: compartimos muchas horas a la Comisión de Investigación de los atentados del 11-M junto con la diputada Uxue Barkos como representantes del Grupo Mixto y compartimos muchos análisis sobre la situación política.
Tuve también la oportunidad de verlo cantar en la antigua fiesta que se hacía en aquellos años del PCE (Partido Comunista Español) en la Casa de Campo de Madrid y tomar unas cañas en compañía de algunos amigos suyos y conservo como una joya la colección recopilatoria de su carrera musical que me regaló el día que nos despedimos como diputados.
Una amistad de una persona sabia, entrañable, que entendió la voluntad independentista que teníamos aquellos 8 diputados y diputadas y de quien aprendí mucho, sobre todo como persona.
Enterado de su muerte, yo ya en la vida civil, cogimos el coche con el amigo Joan Tardà y fuimos a su entierro en Zaragoza, donde acompañamos en el sentimiento a su familia, a quienes les había hablado de aquellos independentistas catalanes. Una pérdida, sin duda, de una calidad humana insustituible, un verdadero amigo de Catalunya.
Por eso estoy seguro que viendo como ha actuado Pedro Sánchez y el PSOE, sin ninguna voluntad de negociar ni con Podemos, ni con los independentistas catalanes, su contundente frase «A la mierda» tendría más significado que nunca y no tendría ningún problema que lo utilizara contra el presidente español.
Así pues, a tu salud Labordeta…«A la mierda Pedro Sánchez!».
