La directora del CNI, Paz Esteban, está compareciendo por primera vez en la Comisión de Gastos Reservados, llamada Comisión de Secretos Oficiales, para ofrecer explicaciones sobre los casos de espionaje con Pegasus detectados en las últimas semanas. Según fuentes del gobierno español, Esteban asiste al Congreso con la documentación que acredita el aval del juez de enlace del Tribunal Supremo con el CNI, Pablo Lucas, para realizar algunas de las escuchas a políticos y activistas independentistas, pero no todas. Estas fuentes cifran las autorizaciones en una o más decena, pero en todo caso lejos de los 65 casos acreditados por Citizen Lab.
Será también la primera vez que la comisión se reúne con presencia de representantes de Bildu, Junts y CUP -ERC ya estuvo del 2017 al 2019- fruto del cambio de sistema de elección de sus miembros impulsado por la presidenta del Congreso, Meritxell Batet. La comisión se celebra a puerta cerrada y los diputados que asisten tienen la obligación de guardar el secreto sobre las cuestiones que se conocen.
El ejecutivo español ha definido la comparecencia de Esteban como un ejemplo de su «transparencia» al explicar la actuación del CNI en el ‘Catalangate’, pero la naturaleza secreta de la comisión, añadida a que según algunos de sus miembros -como el portavoz del PNV, Aitor Esteban- nunca se explique “ningún secreto de Estado”, ponen en duda que sirva para esclarecer el caso de espionaje a los líderes independentistas destapado por Citizen Lab y publicado por The New Yorker.
De hecho, el funcionamiento de la comisión impide que los diputados asistan con teléfonos móviles o saquen copias de los documentos que se presentan. Los diputados tampoco reciben documentación previa sobre la cuestión que se aborda. Tampoco podrán explicar en la salida ningún detalle de lo que se ha explicado por la amenaza de vulnerar la ley de secretos oficiales que limita la publicación de cuestiones relacionadas con la seguridad del Estado.
Paz Esteban, cuestionada
La presidenta del CNI, Paz Esteban, asiste quizá por última vez. El espionaje en los móviles del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, y de la ministra de Defensa, Margarita Robles, la sitúan en el epicentro de las críticas desde dentro y fuera del gobierno español. Esteban se enfrenta a acusaciones de vulneración de derechos por parte de Podemos y de los partidos independentistas ya la vez de no haber sabido proteger la privacidad de las comunicaciones del gobierno español.
Según el diario El País, que cita fuentes del CNI, Esteban acudirá a la comisión con las autorizaciones judiciales emitidas por el Tribunal Supremo que avalan las escuchas del CNI a líderes independentistas. Sin embargo, dice el rotativo, no son todas las detectadas por Citizen Lab y publicadas por The New Yorker.
Presencia de las formaciones independentistas
La comisión se reunirá por vez primera en tres años. No se había constituido esta legislatura por la carencia de acuerdo entre el PSOE y el PP sobre su composición. Hasta la semana pasada una resolución de la presidencia del Congreso establecía que hacía falta 3/5 partes de los diputados (210 votos) para convertirse en miembro, y el veto del PP dejaba fuera a los diputados de Bildu, por lo que se incumplía l obligatoriedad de que estuviera presente un miembro de cada grupo parlamentario.
La semana pasada la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, emitió una nueva resolución donde rebajaba el número de votos necesarios a mayoría absoluta (175 diputados de los 349 actuales), lo que permitió elegir a sus miembros a Gabriel Rufián (ERC), Míriam Nogueras (JxCat), Albert Botran (CUP) y Mertxe Aizpurua (EH Bildu). También estarán Héctor Gómez (PSOE), Cuca Gamarra (PP), Iván Espinosa de los Monteros (Vox), Pablo Echenique (Podemos), Edmundo Bal (Cs), y Aitor Esteban (PNV).
