Al rey Juan Carlos ya no le queda credibilidad. La monarquía está en sus horas más bajas. Ahora añadimos otra novedad contra el Borbón. Mirabaud, es que el banco donde Juan Carlos I guardaba casi 65 millones de euros, cerró la cuenta del rey emérito en el momento que se descubrió su cacería de elefantes en Botswana y, en consecuencia, el escándalo apareció en muy medios internacionales, destrozando por enésima vez la imagen del borbón.
Según Yves Bertossi, el fiscal que investiga el caso de blanqueo y fraude fiscal de Juan Carlos I, recuerda que fue después de aquellos hechos que se descubrió su relación con Corinna, ya que había ido a Botsuana con ella y su hijo. Después de aquello, el rey emérito fue trasladado a España para ser operado de la cadera.
Además, según las declaraciones del fiscal suizo, recogidas por El Plural, se investiga si estos 65 millones corresponden a una rebaja del 30 por ciento en la oferta final de un consorcio de empresas españolas que ganaron la abre de el AVE entre Medina y la Meca.
De hecho, el directivo de Mirabaud reconoció al fiscal que no había ninguna verificación sobre este dinero, recibos en 2008 a la cuenta del Borbón. Como ya se sabe, el gestor de fortunas Arturo Fasana ya declaró que estos millones se trataban de una donación del rey de Arabia Saudí.
Pero la mala suerte del monarca no acabó ahí, siete meses después de que el rey matase al elefante, el Gobierno de Botsuana prohibió la caza en el país. Tribus como bosquimanos y bayei pagan las consecuencias y el turismo ha caído en picado. Juan Carlos, su amante Corinna y su amigo Eyad Kayali también sufrieron desgracias, tal como estamos informando casi a diario desde Las Repúblicas.
