Inés Arrimadas vuelve a ser noticia por su arrogante actitud como ya ocurrió en la manifestación del Orgullo LGTBIQ+.
El debate de investidura de Pedro Sánchez ha dejado muchas imágenes para el recuerdo: enfrentamientos, tensión, cansancio, aburrimiento… pero una de las situaciones que más llamó la atención fueron las caras y gestos de Inés Arrimadas desde su escaño.
La situación ocurrió cuando Sánchez llamó «chaquetero» a Rivera y le pidió que no llame «fascistas» a las feministas y al colectivo LGTBI. «Para ustedes todos son fascistas: las feministas, los manifestantes del Orgullo, el PSOE. Eso sí, nada de etiquetas a la extrema derecha, como dice la propia Inés Arrimadas. Todos son fascistas, menos la extrema derecha. A mí no me gusta poner etiquetas, pero esta vez sí lo haré. Su etiqueta es reversible, como las chaquetas«, indicó el presidente en funciones.
La diputada de Ciudadanos no pudo disimular sus pensamientos y mostró con sus gestos y expresiones faciales la disconformidad con lo dicho por el presidente del Gobierno en funciones.
La diputada de Ciudadanos no pudo disimular sus pensamientos y mostró con sus gestos y expresiones faciales la disconformidad con lo dicho por el presidente del Gobierno en funciones.